viernes, 3 de junio de 2016
Publicado por: Administración | Categorias: Contabilidad y Finanzas, Negocios
El apalancamiento
financiero consiste en financiar una inversión con deuda, con recursos ajenos,
para aumentar la rentabilidad del
capital propio. Es una relación entre crédito y capital propio para
invertir en una operación financiera. Para que quede más claro, es utilizar
deuda para aumentar la cantidad de dinero que vamos a destinar a nuestra
inversión.
Cuanta más deuda
solicitamos, es mayor el apalancamiento y por tanto menor la inversión de
nuestro capital, de esta manera cuanto
más reducimos el capital propio mayor rentabilidad obtenemos. Pero cuidado,
si aumentamos el apalancamiento el riesgo de no poder afrontar los pagos de la
deuda es mayor.
La palabra
“apalancamiento” en economía se usa para utilizar la deuda como palanca para
aumentar las posibilidades de inversión.
Para invertir mediante un
apalancamiento financiero en nuestro negocio hay que analizar bien la inversión. Cuanta deuda vamos a solicitar,
cuanto capital propio vamos a usar y lo más importante como vamos a hacer
frente a la deuda.
La razón por la que se
usa esta fórmula financiera de inversión se debe a que posibilita la obtención
de una mayor rentabilidad de nuestro capital en lugar de usar nuestros propios
recursos.
Existen una amplia
variedad de inversiones y operaciones para el apalancamiento financiero con una
mínima aportación de capital propio. El apalancamiento es una herramienta
financiera ideal para inversores con experiencia en este tipo de inversión que
saben maximizar la rentabilidad.
Una de las condiciones
esenciales para que se produzca un buen apalancamiento es que la rentabilidad
de la inversión siempre sea mayor que el tipo de interés de la deuda.
Los apalancamientos
financieros se clasifican en tres tipos:
- Apalancamiento
financiero positivo: se produce cuando la tasa de rendimiento de los activos de
la empresa es mayor que la tasa de los intereses que debemos pagar por los
fondos que ha obtenido en el préstamo. Es decir, que es productiva la obtención
de fondos que provienen de un préstamo.
- Apalancamiento
financiero negativo: se produce cuando es improductiva la obtención de fondos
que provienen de préstamos. La tasa de rendimiento de los activos de la empresa
es menos a la de los intereses que debemos pagar.
- Apalancamiento
financiero neutro: se produce cuando es indiferente o igual, es decir que los
fondos que hemos obtenido del préstamo, su rendimiento, es igual a la tasa de
interés que pagamos por los fondos del préstamo.
Así que si decides
apostar por esta táctica debes tener muy presente los riesgos que puedes sufrir
por si no puedes cubrir la deuda obtenida. Apostar por un experto es la mejor
opción si se decide usar esta herramienta financiera para tu negocio. Usar
adecuadamente el endeudamiento es una buena vía para lograr mejorar la
rentabilidad sobre los recursos propios de la empresa. Es esencial saber
gestionar correctamente la cantidad de la deuda que hemos asumido.